Hace ya mas de 20 dias que tuvimos la desgracia de despedir a un maestro en todo el sentido de la palabra ya que no solo era bueno como docente, observador, cariñoso, justo y directo al corregir un trabajo, era un artista amante de su ciudad y sus tradiciones, su obra ha marcado un hito en Arequipa y siempre será recordado con mucho cariño por todo esto.
Es una verdadera lástima que muchas veces tenemos a las personas presentes en el día a día y no valoramos tanto su presencia como en el momento que ya no estan, me he demorado tanto en dedicarle unas lineas porque aún me parece que lo veré entrar por la puerta de la escuela de Artes como lo hacía cotidianamente, se venía caminando desde su domicilio en Umacollo porque le gustaba caminar y lo consideraba un buen ejercicio.
Debo de admitir que las cosas no serán las mismas para ninguno de los que trabajamos alli y tampoco lo será para los estudiantes pues ellos han perdido una guía muy importante y para nosotros particularmente para mi, he perdido un amigo protector y amable que siempre me saludaba con una sonrisa y algún que otro comentario jocoso sino un consejo y mucho ánimo.
Pase lo que pase, aunque parezca que hay un silencio; el homenaje va permanente en nuestro interior, en nuestros corazones y pasará de generación en generación contando la historia de este nuestro muy querido "Pantita" ...
Estas cortas líneas son dedicadas con mucha admiración para él y solo puedo colocar la imagen de la entrada de la escuela de Artes de antaño, donde tantas veces llegó a impartir su labor con entusiamo y a compartir su experiencia con generosidad pues su imagen la llevo en mi mente y alli quiero que permanezca como la ultima vez que lo vi celebrando una ocasión muy especial junto a su querida Rosmery...¡Que viva siempre en nuestros corazones José luis Pantigoso Rodriguez!
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